Fue increíble porque, a diferencia de las veces pasadas, no había casi nadie y pude disfrutar de sus salas como no lo había hecho jamás. Parece ser que no mucha gente sabe que los viernes está abierta hasta las once de la noche.
Para saludar al otoño, tres fotos del Castillo de la Reina Blanca sobre los estanques de Commelles que, bajo la bruma, parecen poseídos por el fantasma de la reina.
Estoy descubriendo que el proceso para publicar un libro es más complicado que la propia escritura. Ahora resulta que el ISBN tarda un mínimo de tres semanas y que el depósito legal no se puede hacer hasta tenerlo. Paciencia. Con...